Comienza la represión en China en vísperas del 25 aniversario de la masacre de Tiananmen, que se conmemora el próximo 4 de junio. La periodista y disidente Gao Yu, que fue arrestada en 1989 por apoyar aquellas protestas pro-democráticas, ha sido detenida bajo la acusación de filtrar «secretos de Estado».
Adaptando el estilo de la «Revolución Cultural» al siglo XXI, Gao Yu ha sido mostrada este jueves en la televisión estatal CCTV confesando su «crimen». «Mis actos han afectado a asuntos legales y dañado los intereses nacionales. Lo que he hecho está mal. Con humildad, acepto la lección y me declaró culpable», reconoció esta periodista de 70 años, cuya cara ha sido difuminada pese a que el nombre aparecía completo en pantalla.
Según la agencia estatal de noticias Xinhua, Gao Yu fue detenida el pasado 24 de abril, dos días antes de asistir a un acto de homenaje al movimiento estudiantil de Tiananmen. Desde entonces, los grupos defensores de los derechos humanos habían alertado sobre su desaparición, confirmada ahora por los medios oficiales chinos.
A tenor de Xinhua, la veterana periodista ha sido detenida porque «en agosto de 2013, una determinada página “web” extranjera publicó íntegramente un importante documento secreto y, como consecuencia, muchos portales de internet lo difundieron. Tras la investigación, la sospechosa Gao Yu ha confesado los hechos de este crimen por haber obtenido ilegalmente dicho documento y habérselo proporcionado a ese portal». Aunque las autoridades chinas no han detallado el contenido del documento, el periódico de Hong Kong«South China Morning Post» apunta que en esa fecha se filtró una circular confidencial del Partido Comunista que instaba a endurecer la represión contra los disidentes. Bajo el nombre de «Documento Número 9», dicha comunicación interna data de abril de 2013 y alertaba de «peligros políticos» como una democracia constitucional al estilo occidental, el respeto a los derechos humanos y la independencia de los medios.
A raíz de tal orden, han sido arrestados disidentes como Xu Zhiyong, el fundador del Movimiento «Nuevos Ciudadanos» que pide más transparencia al autoritario régimen de Pekín y cumple una condena de cuatro años de prisión.
Oleada de arrestos
A la detención de la periodista Gao Yu se suma la del abogado Pu Zhiqiang, especializado en derechos humanos, y otros cuatro activistas que participaron el 26 de abril en el acto en recuerdo de Tiananmen. Como todos los años, la Policía china arresta o confina bajo arresto domiciliario a activistas y familiares de víctimas de la masacre cuando se acerca su aniversario, especialmente significativo en esta ocasión al cumplirse un cuarto de siglo.
En 1989, cuando era segunda redactora jefe del «Semanario Económico», una publicación considerada progresista, Gao Yu apoyó las manifestaciones de los estudiantes en Tiananmen. Dentro del aplastamiento de la revuelta, el régimen cerró la revista y la detuvo junto a otros destacados intelectuales. En 1993, Gao Yu volvió a ser arrestada y, poco después, condenada a seis años de cárcel por filtrar secretos de Estado, la misma acusación a la que ahora se enfrenta. Desde su liberación en 1999, ha sido vetada en los medios chinos y solo ha podido trabajar como «freelance» y comentarista política en páginas «web» extranjeras, entre ellas una en mandarín del servicio de noticias alemán Deutsche Welle. Sus columnas, muy criticadas por los altos cargos del régimen, la han llevado finalmente a una nueva detención.
